Crecimiento económico provincial y nacional

Por: Felix Santana, administrador financiero de RD.

Los Organismos Internacionales de Financiamiento están preocupados por el desarrollo de los países no solo en aspectos financieros propiamente dicho, sino también en educación, salud, vivienda, seguridad, en fin desarrollo humano, en la lucha por mitigar la pobreza y la desigualdad  para avanzar hacia un futuro más próspero.

Sin lugar a duda la humanidad tal como señalan economistas del Banco Mundial, se enfrenta a una serie de crisis que afectan la calidad de vida y los medios de subsistencia de las personas en casi todas partes.

El lento crecimiento, el aumento de los conflictos y la fragilidad, la persistencia de la desigualdad y los fenómenos meteorológicos extremos han causado conmoción en todo el mundo.

Mientras las economías de ingreso alto muestran signos de resiliencia, las perspectivas de las economías de ingreso bajo y los países frágiles siguen siendo sumamente preocupantes.

Si bien es cierto que la pobreza no solo es cuestión de ingresos, millones de personas también se ven privadas de elementos vitales básicos, como la nutrición adecuada, atención de salud, educación, seguridad y vivienda.

Plantea el Banco Mundial que con el fin de superar las múltiples crisis actuales y lograr un mundo más justo, seguro y próspero es fundamental implementar soluciones audaces y realizar una acción internacional coordinada.

Los países de ingreso mediano deben acelerar el crecimiento económico y mejorar la capacidad productiva de los hogares más pobres invirtiendo en educación, infraestructura y servicios básicos.

Los países de ingresos bajos deben promover la inversión en capital humano, físico y financiero. Si se quiere lograr el máximo impacto en la reducción de la pobreza, deben crear oportunidades de empleo e impulsar un mayor crecimiento que sea inclusivo.

También se plantea la mitigación y la adaptación al cambio climático. Una de cada cinco personas está en riesgo de verse afectada por peligros relacionados con el clima en todo el mundo.

Para avanzar, se debe impulsar el crecimiento inclusivo y la resiliencia. Las desigualdades en ingresos y de oportunidades siguen siendo elevadas en muchos países, en especial en América Latina y África subsahariana.

RD

Partiendo de estas reflexiones, la República Dominicana debe verse en ese espejo y concentrarse más en la creación de nuevos empleos, mitigar los efectos invernaderos, la educación, la seguridad, proveer más viviendas, hacer crecer no sólo las principales ciudades de la nación sino los pueblos que inclusive tienen grandes potenciales desde el punto de vista turístico, comercial y manufacturero, con el propósito de evitar el desplazamiento de sus habitantes a las principales ciudades.

Visitando algunas comunidades como Jarabacoa, San Pedro de Macorís, San Cristóbal, Puerto Plata, entre otras no menos importantes, se comprueba que muchas de las comunidades hasta lejanas de la capital del país, como las del sur profundo, noroeste, fronterizas, el superior gobierno que presidente el ciudadano presidente República Luis Rodolfo Abinader Corona, se han hecho grandes inversiones que han contribuido al crecimiento económico de las mismas.

Realmente es palpable cómo los habitantes de dichas comunidades hoy se ven en plena actividad impulsando los cambios necesarios de dichos pueblos, los cuales son atractivos para el turismo interno.

De ahí que semana tras semana estos lugares recónditos son continuamente visitados por lugareños de otros pueblos contribuyendo con el dinamismo económico y todo producto de las inversiones que realiza en ellos el actual Gobierno Dominicano.

Hace poco se presentó ante la Cámara de Diputados el anteproyecto de ley de modernización fiscal que tanto esperaba el país y que el presidente tuvo la valentía de darlo a conocer, pero el mismo fue abortado ya que algunos sectores lo satanizan atemorizando a casi todo el país sin que este fuese conocido en esencia.

A pesar de ello, meses después economistas, financistas y sectores sensatos y conscientes se han dado cuenta que real y efectivamente la señalada modernización fiscal es una necesidad para que el país pueda seguir transitando por la senda del crecimiento y por supuesto por el derrotero del desarrollo.

Esto así ya que con el nivel de ingresos que hoy el gobierno percibe por concepto de impuestos y aranceles sería cuesta arriba llevar al país al verdadero desarrollo económico y social que demandan los nuevos tiempos.

Si bien es cierto tal como expresa el Banco Mundial que los ingresos no lo es todo, no menos cierto que sin estos no se podría aminorar el déficit fiscal que por varios años el país presenta causante del alto endeudamiento que impacta directamente las finanzas públicas.

Modernización fiscal

Así como hoy se expresan economistas y financistas y sectores sociales, no es un secreto que se hace necesario la modernización fiscal entre otras reformas para que el país pueda continuar pasando por el camino del desarrollo humano que la población dominicana demanda con urgencia.

Se puede asegurar que si el próximo 2025 se creasen las condiciones favorables para que sea sometido nueva vez dicho anteproyecto de ley sobre la modernización fiscal al Congreso, el Gobierno Dominicano lo apoyaría sin reservas ya que no es ningún secreto que las finanzas públicas necesitan de la misma con suma urgencia.

Si se quiere más y mejor educación, salud, más inversiones públicas en las distintas provincias que coadyuven con su crecimiento económico local y nacional, más viviendas, seguridad, mejoras salariales, necesariamente se debe disponer del incrementos de los ingresos para financiar el progreso y, porque no, la democracia y tranquilidad del pueblo tal como siempre sugería el gran líder de masas dominicano, José Francisco Peña Gomez, que si se desea tener un pueblo tranquilo es necesario financiar la democracia y el porvenir de este.

felix.felixsantana.santnagar@gmail.com